Hace tan sólo una semana que acabamos de regresar de un nuevo viaje a mi querido Sudeste Asiático. Cada vez me cuesta más abandonar esa zona la del mundo y cada vez me siento más como si estuviera en casa…
El destino elegido para este año fue Camboya. Un lugar que llevaba mucho tiempo con ganas de visitar y del que he vuelto total y locamente enamorada. No paran de pasar por mi cabeza los cientos de sonrisas con los que me he topado y que han conquistado profundamente mi alma.
Camboya es un país en mi opinión muy infravalorado como destino. La mayor parte de viajeros le conceden tan sólo 4 o 5 días (o ni tan sólo esto) a Siem Reap con el fin de visitar las espectaculares ruinas del complejo de Angkor y casi siempre como extensión de otros viajes a paises vecinos como Tailandia , Vietnam o Laos.
Los templos de Angkor son sin duda dignos de esa coletilla al final o al inicio de un viaje, pero no regalarle al país la oportunidad de conocerlo más allá de las “fronteras” de Siem Reap es una auténtica pena.
Tener la oportunidad de recorrer Camboya disfrutando de su día a día, de su realidad cotidiana y no del parque temático que se ha construido alrededor del complejo de Angkor. Aunque inisisto de nuevo, que el complejo es de los sitios más espectaculares que he visto nunca a nivel arqueológico.
Pero en mi humilde opinión es muy difícil hacerse una opinión veraz sobre la realidad de Camboya (si eso es lo que se pretende, por supuesto) visitando sólo la ciudad de Siem Reap, atestada de turistas, de bares y restaurantes exclusivamente de occidentales, de tienditas de diseño y de tantos y tantos lugares dirigidos tan sólo al bienestar del turista, que añora la tortilla de patatas, el burrito mejicano o los spaghetti a la bolognesa… Y cruzándote a cada segundo con viajeros de todos los países del mundo.
Y es una lástima perderse tantos otros lugares donde la sonrisa sincera y limpia es un intenso constante. Donde decenas de niños salen a tu encuentro para chocarte la mano, saber tu nombre y definitavemente robarte el corazón. Donde pasear tranquilamente por mercados o calles donde apenas te topas con un sólo turista y todo el mundo te saluda sonriente. Donde los jovenes curiosos, quieren saber de tu vida, contarte sus sueños a pesar de sus míseros sueldos, llevar a cabo largas charlas y practicar contigo su nivel de inglés. Donde sentarte tranquilamente en una mesa de un bar destartalado (o no tanto..) y ver su cotidianedidad pasar lentamente ante tus ojos. Donde el mismo viaje en autobús de un lugar a otro ( aún a pesar de los karaokes o intragables pelis de héroes..que al final acabas soportando incluso con humor..) se convierte en momento de charlas con tu vecino de asiento. Sin duda, ¡lo más grande de este país, son sus gentes!
Espantada he leído en algunos foros, comentarios de personas que decían que el país no mereceía la pena más allá de los templos de Angkor.Estoy segura que ellos no habían ido más allá… ¿Cómo hacerse una visión tan banal sin haber pisado ningún otro lugar? Camboya es mucho más que Angkor Wat, Ta Prohm o Bayon o los restaurantes de Siem Reap y merece la pena dejarse llevar por su día a día…
Recorrimos mucho menos de lo que me hubiera gustado, pero he pasado en ese país las dos semanas más maravillosas de los últimos tiempos. Aún a pesar de no quitar de mi corazon ese nudo que se va a haciendo cada vez más grande al conocer cada vez un poco más, la tremenda realidad de este país y sus gentes.El infierno de la guerra , el genocidio y la tortura, vivido hace tan sólo 30 años, que trajo al país un derramamiento de sangre y dolor tan brutal que es casi imposible siquiera de imaginar.
Los restos de las guerras ajenas: las minas y bombas racimo que dejan en este país el porcentaje mayor de discapacitados físicos del mundo. (Durante los bombardeos de EEUU sobre Camboya entre 1969 y 1973 se lanzaron más bombas que las utilizadas por todos los bandos en la segunda guerra mundial ). El lado oscuro del turismo sexual, la pobreza, las mafias, la inestabilidad política y la tremenda corrupción, la grotesca máquina de la explotación infantil y tráfico de niños…
![]() |
Aún así, Camboya es tierra de esperanza y los camboyanos siguen ofreciéndote una implacable sonrisa y una tremenda amabilidad que no han dejado arrebatarse.
La guía Lonely Planet que me ha acompañado estos días resume en una de sus páginas, lo que he sentido durante este viaje a la perfección
[quote align=”center” color=”#999999″]” Así son el yin y el yang de Camboya, un país que estimula y confunde. Cuantas más capas se quitan, más ganas dan de llorar, a veces de pena y a veces de alegría” .[/quote]
Hemos completado este maravilloso viaje al centro de Indochina con otros destinos.
Iniciamos el viaje con un par de días en Dubai como stopover antes de llegar al Sudeste Asiático, puesto que volábamos con Emirates Airlines.
Suelo ser de las personas que siempre le encuentran algo bello a todos los lugares, pero creedme que con Dubai me ha costado mucho. Sinceramente, no es un lugar que me haya entusiasmado. Quizás también el hecho de ir en Agosto, con casi 50º y en pleno ramadán, que hacía que tuviéramos que beber a escondidas el agua para no deshidratarnos a 48º, ha hecho que todo se desluzca un poco. Pero un lugar donde los mayores atractivos son sus enormes centros comerciales, sus playas artificales y su lujo y ostentosidad, sinceramente, no me llama en absoluto…Aún a sabiendas de lo que me iba a encontrar…
![]() |
Una ciudad en continua construcción en mitad del desierto, a costa del sudor casi esclavizante de los miles de indios, pakistaníes, bangladeshíes que cobran 100 € al mes y viven en barracones.Más del 20% de las gruas mundiales se encuentran en esta ciudad y a pesar de que todas las inversiones hechas hasta el momento no han dado el resultado que los dubaitíes hubieran esperado, siguen y siguen construyendo.
Los amantes de las “frikadas” y lugares estrambóticos encuentran en esta ciudad-emirato su paraíso. Los centros comerciales más grandes y lujosos del mundo, donde las más exclusivas tiendas comparten espacio, con los lugares más inverosímiles como una estación de esquí- la más grande cubierta del mundo, por supuesto- con nieve y temperaturas de hasta 4 grados bajo cero, en mitad de un desierto donde se alcanzan temperaturas que alcanzan casi los 50 ºC. Con el acuario-pecera más grande del mundo-de nuevo- repleto de peces, tiburones y mantas rayas rodeado de tiendas de moda…. Donde las islas artificiales con formas de palmera o mapas terráqueos comparten espacio con los rascacielos más altos del mundo y los hoteles más lujosos…
![]() |
Cuesta encontrar una zona “real” y “verdadera”, y aunque existe en cierta medida, en la zona de Deira y los creeks , hace tantísimo calor que casi no puedes ni pisar la calle.
Tras Dubai, y como entrada a Asia, antes de acceder a Camboya, estuvimos un par de días en Bangkok.Siendo ya la cuarta vez que la pisaba, fue como volver a casa de nuevo. La capital tailandesa ofrece sentimientos encontrados a quien la visita. La adoras o la detestas. Yo soy de las primeras, y no me canso de perderme por sus calles una y otra vez.
Y para concluir nuestro periplo por Asia de este verano, terminamos unos días en las islas Perhentian de Malasia. Un lugar que me cautivó hace tres años y al que soñaba con volver.
Temí que la segunda vez no me llenara tanto como la primera, pero lloré de emoción al desembarcar de nuevo en Besar y encontrarme una vez más, en ese fantástico lugar del mundo. Hay algo más de turismo que la última vez que estuvimos, puesto que se han construido algunas cabañas más, pero sigue siendo el paraíso con el que soñaba tras pisarlo la primera vez. La pena fue que a pesar de ir en época seca, el tiempo no acompañó demasiado. Algún día lluvia, todas las noches unas tormentas totalmente espectaculares que te hacían sentir como si la isla fuera a hundirse y nublado casi siempre, lo que hizo que el entorno y sus aguas deslucieran mucho. Pero aún así, unos días memorables y volver a pisar algunas de las playas que me habían robado el corazón y poder ver cientos de peces, tortugas saliendo a la superficie a respirar , incluso poder ver tortuguitas recién nacidas.. han hecho que de nuevo guarde el mejor de los recuerdos en mi corazón…
Sin duda, ha sido un viaje que me ha ofrecido tanto que no me queda más que sentirme profundamente agradecida al mundo por haberme regalado tan espectaculares experiencias.
Aquí podéis ver algunas de mis
Amén a todo lo que has dicho de Camboya…
Camboya tiene la capacidad de llevarte al infierno y al cielo en cuestión de segundos.
Al infierno porque la desigualdad, la injusticia y el abandono cabrean.
Al cielo porque las sonrisas y la generosidad de este pueblo son infinitas.
Enhorabuena por el viaje, por haberlo disfrutado y porque no te fies de los que se dice en algunos foros … al viajar hay que seguir al corazon el siempre sabe a donde hay que ir … 😉
Un abrazo enorme !
Gracias por tu comentario y tus palabras Any.
Sin duda, hay que seguir al corazón…
lástima no haber tenido más días, para haberme dejado llevar un poco más.. 😉
Ciertamente ha habido momentos dolorosos y de tremenda rabia y "cabreo" por ver y ser consciente de tanta injusticia! Pero como dices la infinita generosidad de este pueblo han superado con creces todo lo demás..
Un fuerte abrazo Any!
Me n'alegro molt que t'ho hagis passat tant bé i que el país t'hagi agradat.
Al 2006 vam creuar Cambodja, per anar a Vietnam. Sempre he pensat que d'haver-nos quedat allí haguéssim encertat, llegint-vos se que aquella sensació era certa i que tenim que tornar.
Una abraçada!!
Muy buen post de introducción! Ahora ya estamos esperando el resto… 😉 y a ver si te decides por su vecino Laos… no te va a defraudar!!! Un petonàs!!!
Precioso todo lo que dices de Camboya!! Yo por desgracia solo conozco Siem Reap (que me ponia los pelos como escarpias) porque me deje llevar por la de la agencia que me insistio en que no habia nada mas que ver en el pais, pero para la proxima esta claro que el recorrido se ampliara. Con BKK me pasa lo mismo!!! Yo soy de las que adoran esta caotica ciudad. Y de Dubai jejeje con 50º y sin poder beber es dificil que a nadie le pueda gustar ningun sitio!!!
Saludines Moon!!
@mesenllà Realment sí, ho he passat molt rebé…S'ha de tornar Lluís. Segur que no us defraudarà.Crec que és un lloc que acaba conquistant a tothom. Una forta abraçada!
@Noe-Serendipity Gracias! Laos està ya on my mind!! jajaja Soñando estoy ya con ir para allà (y combinarlo con unos días más en Camboya..jajajaja) Un petonàs reina!
@Paco&Vero; Si es que es lo habitual . Es mucha la gente a la que le he visto decir, escribir.. que no hay nada más que ver en el país.. A nivel monumental, pues sí, Angkor ensombrece todo lo demás, pero vivir el día a día del pueblo camboyano es tanto o más enriquecedor.Hay lugares del país, donde lo que realmente se disfruta es el poder socializar con la gente, pasear con calma por sus calles y alrededores o simplemente sentarte en un lugar a mirar la vida pasar. Además les hace tanta falta que agradecen una barbaridad que vayan turistas, viajeros o como le quieras llamar….. Un besazo guapa!
Una fabulosa introducció del viatge, perquè m'imagino que continuaràs explicant més coses, no?.
Llegint el que has escrit fas agafar moltes ganes de conèixer el país.
En quant al tema de les mines, hi ha algun perill o està tot ben senyalitzat?
Un petonàs
@MTTJ Gràcies! Sí, sí que continuaré explicant més coses! El que no faré és una crònica detallada de tot dia a dia, però sí, hi ha moltes coses que contar…
En quant al tema de mines, no pateixos. Si no surts dels camins o t'adentres a boscos i zotnes més remotes, que no és l'habitual és tot ben segur. El perill és als camps o els llocs no transitats i més remots. On n'hi ha més és per la part de Siem Reap cap amunt i a la part Oest. la part que linda amb Tailandia. Hi ha temples més remots per la zotna d'Angkor on també recomanen no sortir-se dels camins. Però vaja que tampoc crec que aneu a parar a zotnes on hi hagi.
La foto que vaig fer jo, era d'un bosc que hi havia als voltants d'un temple aprop de Battambang , però era dins de la espesor del bosc. Hi havia bastants senyalitzacions. Jo la vaig fer des de les escales i de ben aprop… Però dins del bosc no hi vam entrar ni de conya 😉
Un petonàs!
Yo soy de las que ha pasado 3 días en Camboya, pero me he quedado con ganas de más! Sin duda, en el futuro volveré para conocer más a fondo este país y su gente.
Por cierto, qué playa más bonita esa de Malasia!!!!
Saludos
@ M.C. Sin duda te lo recomiendo!! El hecho de que te hayan quedado ganas de más es lo más importante 😉 Estoy segura que te encantará.
En cuanto a la playa de Malasia, es un lugar mágico, sin nada más que selva y mar (y algunas tortugas 😉 ) Es un sitio fantástico.
Un abrazo y gracias por el comentario!
que recuerdos y nostalgia a la vez y es que Camboya es junto a Laos el mejor pais que he visitado con un potencial enorme que todavia no han conseguido transformar en desarrollarse por culpa de la historia reciente que todavia envuelve el pais pero sin lugar a dudas un pais inprescindible para el amante de los viajes y la cultura
Battambang, es una de las ciudades que mas me gusto con su tren de Bambu, las cuevas de la muerte y sus alrededores verdes
gran entrada y gracis por ponerme la piel de gallina otra vez
un abrazo
Gracias a ti por leerme y por tu comentario 😉
A mi Battambang también me gustó mucho.
Voy rauda a leer tus entradas sobre Laos. Creo que "caerá" proximamente jejej
Un abrazo Bleid
Mira que tengo ganas de ir a Camboya y ahora poniendo los dientes largos!! aghghg 🙂
Envidia Sana.
Ya tienes un seguidor más!!, me ha gustado mucho tu blog.
Un saludo, te espero en mi blog pronto http://www.thewotme.com.
Esta semana me mudo a Phnom Penh y sin haber pisado aún Camboya, cualquier info sobre el país es bien recibida. En este caso, tu post me ha cautivado, desprende una energía positiva brutal. Gracias por dedicar tu tiempo a tan bonito fin… Desde hoy te seguiré en twitter para estar pendiente de todo. Saludos!!
Muchísimas gracias Irene!
Te deseo todo lo mejor en Camboya. A mi me ofreció muchísimo, y estoy segura que a ti también te lo ofrecerá. Sólo te digo, que cuando abandoné el país se me saltaron hasta las lágrimas de la pena por abandonarlo. Y estoy deseando volver. Y me da que va a ser pronto.
Gracias de nuevo por tus bonitas palabras y mucha suerte en tu nueva vida en Phnom Penh!
Un abrazo